LOS VALORES DEL SIGLO XXI...NUESTRA PRACTICA COMO SUPERACION.

Cuántos maestros?...cuantas enseñanzas?, cuantos símbolos?.....El combate supremo?...La búsqueda de la perfección individual a través de la superación personal de las limitaciones tanto físicas como psicológicas-mentales.

La práctica de las Artes Marciales es una vivencia íntima, indescriptible, indestructible y única experiencia del movimiento que de por sí solo es movimiento y se le hace surgir de la nada eterna hacia un fin infinito.

Que buscamos? los elementos de toda iniciación no representa más que símbolos, estructuras, arquetipos... ¿Que esconden? LA IDENTIDAD, la búsqueda de nosotros mismos.

Para llegar a ello, tan solo el Vacío. Vacío rebosante de vida, de poder....de nada, que incongruencia...verdad?

Tensión, relajación; Concentración, dispersión; interiorización, exteriorización; Recogimiento, expansión; Lucha, Paz; mucha Paz......un sin fin.

Cuando hablan los cuerpos todo lo demás sobra.

Todos sentimos el Reto, el Dolor, la Oscuridad, la soledad, el encuentro...La conversación corporal utiliza un lenguaje mucho mas sutil y rico en matices que el oral. Dejemos los cuerpos hablar. Cada cuerpo utiliza un lenguaje propio y una vibración única para ese cuerpo. Silencio!,....escuchas??? eres capaz de silenciar tu propio Yo?

Las ambiciones, los rencores, el ego, el miedo, muchos miedos, la cobardía, la ira, complejos, la crítica destructiva, la mala gestión de tu práctica enmarañada con un estatus........La ignorancia, Todo esto es una línea sutil que te aparta de la realidad y de la verdadera finalidad de la práctica, que te agarra te enraiza y forman muros que empiezan a resultar impenetrables.

NO PODEMOS PRACTICAR O ABANDERAR UNA ARTE MARCIAL BAJO SÍMBOLOS O SENTIMIENTOS DE RENCOR, NEGATIVIDAD, DAÑAR O EN DEFINITIVA DESTRUCCION(físicia, verbal, escrita...). Y menos en disciplinas como el Aikido en el que lo físico camina de la mano con lo espiritual.

El respeto, el conocimiento o la sabiduría se reconocen por el silencio y el Kokoro "corazón", por no "entrar al trapo" de las oscuridades que a todos nos acechan. Céntrate en ti, la Gran Batalla no es contra otro - otros, EL COMBATE SUPREMO es conmtigo mismo,... esta es la finalidad de tu práctica.....y no es fácil, de hecho muchos se quedan por el camino o tomaron otro equivocado....siempre con posibilidad de volver, retomar bajo un sentimiento de humildad, de estudio sincero y honesto en el que prevalezcan la cualidades como persona con una predisposición a tener un corazón limpio y purificado.

Para los creyentes y para lo que no lo son:

"Para atraernos,Nuestro Señor nos regala un multitud de gracias
que nosotros pensamos nos pueden llevar fácilmente al cielo. Mas
no sabemos, que para crecer, necesitamos del pan básico: la cruz,
la humillación, las pruebas y las negaciones". Padre Pío


Todo esto lo podemos ver en el antiguo BUSHIDO...que debería ser también el actual BUSHIDO, ya que el tiempo no puede etiquetar los valores, el respeto y la educación como personas que somos.

Nuestra práctica diaria debe ir acompañada de corregirnos a nosotros mismo como método de purificación y de superación en todos los términos.

El Bushido posee siete reglas o virtudes que lo definía y lo definen.

Rectitud (Gi) donde se busca ser justo y honrado, en la justicia no hay términos medios, las cosas son correctas o incorrectas.
Coraje (Yuu) es tener valor, ser arriesgado, no tener miedo y actuar con inteligencia, respeto, fuerza y precaución.
Benevolencia (Jin) es sentir compasión, ayudar a los demás en cualquier oportunidad, utilizar las habilidades adquiridas para ser útil a otras personas.
Respeto (Rei) ser cortés aún con los enemigos--Que lejos estamos de esto-- ser digno del respeto y no imponerse por la fuerza, jamás ser crueles o despiadados y recordar que el respeto es un valor que nos diferencia de las bestias.
Honestidad (Makoto) ser sincero ante todo, tener valor en la palabra y en los hechos, hablar y hacer debe ser lo mismo, cumplir siempre las promesas aún cuando la vida está en juego.
Honor (Meiyo) esta virtud es siempre juzgada por uno mismo, el conocimiento profundo del propio ser es el más claro reflejo de la realidad, el Samurai sabía que nunca podía engañarse y evadir la realidad.
Lealtad (Chuu) responsabilidad total por aquellos bajo su cuidado, el Samurai es fiel ante todo e incapaz de traicionar, daba la vida por sus protegidos sin pensarlo dos veces.

El Bushido es un código muy noble, con ideales muy humanos que le brindan al guerrero la posibilidad de darse cuenta de que a pesar de haber sido entrenado para matar continúa siendo humano y sus responsabilidades con los demás son muy importantes, aún con sus enemigos.

El Samurai no mataba por placer, estaba seguro de sus habilidades guerreras y no sentía necesidad de demostrarlas. Su mente estaba en paz y su espíritu se enriquecía con los valores del Bushido.

Esta filosofía ha trascendido con el paso de los años y acompaña a muchas Artes Marciales japonesas tradicionales como por ejemplo el Kendo y el Aikido.
Pero es indudable que los mayores seguidores del Bushido fueron los Samuráis que no solamente respetaron el Bushido sino que vivieron a través del mismo y que todos debemos de aprender y a aplicar muchos de sus principios en nuestro entrenamiento y vidas cotidianas.

Espero que este artículos ayude a alguien.

Gracias.
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